Conflicto del Subte: Hay un solo responsable

CUANDO SE TRATA DE DESTRUIR, NADA IMPORTA Y TODO ES MÁS FÁCIL Y RÁPIDO:

El 2013 se acerca velozmente, a mucha mayor velocidad en la escala temporal de la política que en la real del calendario. A mediados de diciembre de este año se debería poner en marcha el proceso de desinversión al que obliga la Ley de Medios Audiovisuales y que implicará un cambio cualitativo en las relaciones de poder mediático, pero las elecciones de medio período obligan a armar a toda velocidad una alternativa opositora a gusto de la prensa monopólica cuyos intereses peligran.
La cadena nacional del miedo y del desánimo ha pasado de la crítica despiadada y sin matices a la acción desembozada.
El panorama no les es alentador, solo está claramente de su lado lo peor del espectro político, los que menos miden, a los otros, los que tendrían en potencia la mayor representatividad, estos desestabilizadores los vomitan por tibios.
Solo son ellos contra el gobierno, en particular contra Cristina. Saben que deteriorando la imagen de Cristina, provocando una caída -aunque sea temporal- en el respaldo popular del que goza, sus perspectivas pueden mejorar de muy malas a regulares.

Macri está en la misma situación, si no logra hacer pié antes de las elecciones del 2013 sus pretensiones para el 2015 casi con seguridad de esfuman. O sale de esa elección, él y su PRO, como la gran fuerza opositora o no tiene otro futuro que el de un partido local en retirada.

En consecuencia unos y otros echan toda la carne al asador. Macri no puede exhibir ni siquiera pequeños logros en la gestión de la cosa pública al frente del gobierno del distrito más rico del país, tampoco se luce como hábil constructor de alianzas políticas. Mediocridad o peor, la nada en la mayoría de los campos, esa es su característica más notable. Su única bandera es presentarse como el más opositor de todos los opositores pero sin que nadie, ni siquiera él mismo, pueda percibir con claridad el porqué, el cómo y en qué él haría las cosas mejor que Cristina.

El traspaso de la administración del Subte es un medio, el mejor que encontraron hasta ahora, para lograr algo en este sentido. Se trata de un puro cálculo. Negarse al traspaso, provocar que la ciudad se quede sin ese medio de transporte es la forma de garantizar su presencia en los medios siempre que obtenga por parte de ellos un tratamiento comprensivo que logre desplazar en el gobierno nacional toda la responsabilidad por la situación.

Como la realidad es bien diferente, hay que cambiarla por lo menos a nivel mediático, no importa si en el proceso hay que mentir, tergiversar, lo que importa es que el producto final resulte plausible.

Hay varios ejemplos. El más notable es el acta acuerdo que inició el traspaso. En ella está la firma del propio Macri. En base a este acuerdo Macri determinó, sin la intervención del gobierno nacional, la suba de la tarifa. A todas luces lo hizo para evitar tener que poner él la parte del subsidio que le correspondía por el acuerdo, en otras palabras, el decidió unilateralmente retirarle a los usuarios del subte el subsidio al pasaje. El gobierno no dijo nada y siguió depositando la parte que le correspondía según el acuerdo. Ahora dice que con eso no basta y que el precio del boleto debería ser más del doble del actual (2,50$), cuanto exactamente no lo sabe porque "no hicimos las cuentas". Pero eso no es todo, no utiliza el dinero depositado por el GN. No lo hace porque supone que de hacerlo validaría aún más el acuerdo que ahora rechaza diciendo que "negoció mal" que "nunca negoció tan mal como esta vez". Es pueril, sin embargo los medios -como La Nación o Clarín y sus satélites- lo dan como una explicación válida. Se equivocó y se arrepiente, a cualquiera le puede pasar, sobre todo con "esa", con "esa" no se puede negociar, sería más o menos el subtitulado de la disculpa.

MACRI ESTÁ DECIDIDO A DEJARNOS SIN SUBTE SI ESO LO BENEFICIA:

 

A buen entendedor pocas palabras bastan - 14/8/2012

 

La Nación de hoy, miércoles 15 de agosto, publica una nota firmada por Andrés Gil Dominguez, que hace precisamente eso, pasa por alto todas las incongruencias e irresponsabilidades de Macri y le echa toda la culpa a Cristina, es decir reconstruye el proceso de los hechos y la realidad actual para salvar a Macri y responsabilizar al gobierno nacional.
Es más, en el mismo diario, los que hasta ayer mismo eran los verdaderos representantes de los trabajadores del Subte en detrimento de los falsos representantes de la UTA, hoy son una partida de bandidos sin personería jurídica y teledirigidos por Cristina para dañar a Macri y a los usuarios del Subte. Todo publicado en el mismo día. Su sinvergüenza no tiene límites.

Y el colmo, una nota titulada: Macri: "Si me bajo del 2015 se arregla todo"
Macri nos quiere hacer creer, él que se bajó de la candidatura a presidente hace menos de un año porque no le daba el cuero que ahora -por obra y gracia de un milagro- es el contendiente más promisorio de Cristina y que, en consecuencia, ésta para desbancarlo se dedica a crearle problemas en la ciudad.
Porque entre su reelección a jefe de gobierno y el momento actual no ha hecho nada que merezca ser destacado sino seguramente todo lo contrario. Si algo caracteriza a su gobierno es el olvido de la gente, de sus problemas y el abuso de las declaraciones públicas en contra de las políticas nacionales del gobierno. A todas luces Macri piensa y actúa más en función del 2015 y su eventual candidatura que en función de los problemas y necesidades de los ciudadanos de la ciudad. Pero ahora está totalmente desbocado -seguramente por lo que siente es una presión de las circunstancias- no le importa el perjuicio que pueda ocasionar si piensa que de ese caos el obtiene algún beneficio.

En un país normal un alcalde -porque eso es Macri aunque se lo llame jefe de gobierno, ni siquiera gobernador- se puede postular para presidente si y solo si en su gestión se ha destacado lo suficiente como para mostrar dotes de gobernante. Sin embargo Macri hace lo contrario no resuelve los problemas, ni aún los que el mismo crea con su dejadez e ineficiencia. El estado de las escuelas y de los hospitales de la ciudad dan buen ejemplo de ello.
Pero no, para Macri no es así, el merece ser candidato, es más, él es el mejor candidato para la restauración gorila, para volver el reloj de la historia a una fecha anterior al 2003, pero en realidad no exhibe sus dotes, en realidad -como el rey- está desnudo y solo él, su corte y los medios hegemónicos que lo apoyan nos quieren hacer ver que está vestido. 
Se dice que Macri goza de "protección mediática", creo que la cosa vas más allá que de un mero y temporal acuerdo de no agresión, creo que es una auténtica alianza, la única que Macri y la corporación mediática lograron concretar. Es un contubernio basado exclusivamente en intereses económicos, a todos ellos les importa mucho más el negocio que la política, el lobby y la presión que la discusión de ideas, que la democracia o la República, solo les interesa mantener sus privilegios y, sobre todo, que no les toquen sus negocios. Como muestra el video, llegan al colmo de no importarles ni siquiera su propia coherencia discursiva.
Felizmente y no creo ser exageradamente optimista, Macri va a terminar bajándose de la candidatura al 2015 por él, por su incapacidad, por su falta de carisma y de credibilidad, su verdadera medida está dada por sus incondicionales los que votarían gustosos -pero tapándose la nariz- a un clon de Menem si se presentase como candidato. Hoy tal cuasimodo no existe, el kirchnerismo acabó con esa posibilidad.

CUANDO SE TRATA DE GOBERNAR PARA CONSTRUIR, TODO ES MUCHO MÁS DIFÍCIL Y PROGRESIVO.

Aunque parezca así al gobierno de Cristina no se lo ataca por el uso de la cadena nacional, por su carácter fuerte o porque aún no se ha retirado del luto. No se la ataca porque alienta la participación juvenil. Se la ataca porque osa señalar quienes son los culpables reales de la crisis económica mundial, porque nacionaliza todas aquellas empresas consideradas estratégicas revirtiendo el proceso de entrega de los ´90. Se la ataca porque lleva adelante una política exterior independiente que pone por delante los intereses regionales a los imperiales. Se la ataca porque pretende democratizar el acceso a la palabra y a la producción y consumo de información, se la ataca porque defiende la verdadera libertad de expresión y no la libertad de las empresas de medios para hacer lo que les venga en gana incluso en contra del interés general.

SE LA ATACA PORQUE GOBIERNA PARA PRODUCIR TRANSFORMACIONES DE FONDO Y PORQUE ADEMÁS LOGRA CREAR CONCIENCIA CIUDADANA DE SU NECESIDAD.

POR TODO ESO Y MUCHO MÁS SE LA ATACA.

MACRI SE ATACA SOLO. EL PEOR ENEMIGO DE MACRI ES ÉL MISMO.

bastadeodio